Expedición al pajar

No sé si sabréis que estoy en proceso de decoración de mi casa nueva. Me temo que a este ritmo llevará años. Pero bueno, poquito a poco va tomando forma.

Uno de los miles de proyectos que tengo en mente para la casa, es limpiar, restaurar, pintar y colocar algunas cositas que he rescatado del pajar de la casa del pueblo. Todos estos tesoros esperan pacientemente en el salón/trastero a que los acondicione y les busque un sitio.

Todos estos tesoros esperan pacientemente en el salón/trastero a que los acondicione y les busque un sitio.

Con las damajuanas tengo bastante claro qué hacer. Sólo hay que lavarlas (mucho) y estarán listas. Las quiero poner juntitas en algún rincón del salón, cuando el pobre recupere su estatus. O tal vez de mi despacho o del dormitorio. Con el tiempo les buscaré una plataforma, balda, taburete o lo que sea que las ascienda un poco. Pero de momento se quedarán en el suelo.

Además, la primavera ha dejado el campo lleno de árboles en flor, y quedarán genial con ramas floridas dentro.

Esto en sus orígenes era uina caja de fruta de madera que mi padre reconvirtió en especiero y que ahora estaba abandonada en el pajar, con la pintura desvahída y la parte superior un poco rota. Tendré que limpiarla, limar lo de arriba y pintarla. Pero sé perfectamente para qué va a servir. Lo colgaré en la pared para tener todos mis hilos y canillas a mano y a la vista.

Por último encontré esta caja de vino. Es nueva y no necesita retoques, a no ser que me dé por pintarla. Lo cierto es que me la traje porque me gustó, pero no tengo muy claro qué hacer con ella. ¿La cuelgo en la pared? ¿La pongo en una estantería? ¿En vertical o tumbada? La tapa se desliza hacia arriba, así que no sé... He pensado que puede servir para guardar rollos de cintas, lazos y cuerdas. Pero no lo veo claro. ¿Alguna recomendación?

¿Qué os parece mi selección? 

¿Habéis saqueado pajares y trasteros para decorar vuestra casa?